Cerca de las 2 decidi bajar del cerro corcovado , el descenso obviamente fue una boludez, lo que me habia constado 3 horas en subir, lo baje en menos de media y al llegar a 200mts del puesto de policía pregunte a un ciclista ,que tambien bajaba, como tomaba para Copacabana y me indico que lo siguiera. Lo segui entonces, primero descendiendo por las antiguas vías del tren y luego ya entrado en partes mas céntricas, por la ciclovia, hasta que llegando a dos cuadras de la Praia Botafogo, el se desvio y me indico como seguir. El carro ya bailaba bastante y me hacia parar de vez en cuando a ajustarle las tuercas pero alcanzaron dos paradas técnicas para llegar a la famosísima playa donde hace pocos años se realizo el Rock in Rio con los Rolling Stones presentándose gratis. La playa, una playa de ciudad, con los edificios a cien metros y obviamente llena, y mas que nada porque era sábado. Me quede un rato ahí, comiéndome las naranjas que quedaban y armándome todos los sanguches que supongo el cocinero habrá calculado durarían hasta la cena, no lo creoooo!!. Despues decidi salir en búsqueda de hostel, y obviamente no quería ir muy lejos. Por suerte a la vuelta encontré el STONE OF A BEACH, cuya manager es Michelle, una simpatica urugayo-brasilera fanatica de la banda cordobesa La Cartelera Ska que habia pasado por el hostel tambien. Deje todo en la habitación y me fui derecho a la playa, eran las 4 y media y me quedarían como mucho una hora y media de sol, que termino siendo una culpa de los edificios y los morros que si bien no hicieron desaparecer la claridad hasta las 6 si taparon el sol, lo suficiente como para que se pusiera fresco. Igual me quede un rato mas viendo jugar al equipo de la playa Copacabana contra el equipo de otra playa, que curiosamente vestia la camiseta argentina, avísenle a diego que quizás esa sea la forma de entrar al mundial, jugar con brasileros.
Me volvi al STONE OF THE BEACH, me pegue una buena ducha, hacia rato que no era de agua caliente, y sali a comprar comida al super que queda cruzando la calle. Coca cola y nuddles fueron parte de la canasta y con eso me fui hasta la cocina para dejar mi vicio un rato en el congelador. Aproveche para conectarme al wi fi del hostel y llamar a casa, avisar que estaba bien, que no me habia encontrado con Ze pequenho y que saldría al otro dia direccion sur de nuevo. Baje a cocinar mis nuddles y mientra lo hacia, un grupo de israelitas me invitaron a una fiesta en un hostel a unas 10 cuadras, una inglesas a ver una película y una austriaca a tomar algo con su amiga y un compañero de habitación, todo esto mientras mis nuddels se enfriaban ya y tomaban forma de tarta fría, igual la coca helada compenso todo. Hecha la digestión me decidi por la opción mas linda, la austriaca, y subi a tomar algo al bar de la terraza del STONE OF A BEACH, que además tiene un pequeño jacuzzi ,que al estar tan al alcance no lo aprecie ,hasta que volvi a pedalear y dije , por que carajo no me meti en el jacuzzi??!!. Nos quedamo tomando algo con las chicas, dos austriacas bastante bonitas pero con nombres que no logro recordar ahora, como el de la mayoría de las personas, y con Peter, su compañero de habitación, un canadiense que trabajaba en minas de oro en Belo Horizonte, obviamente para una compañía de su país y que ese mismo dia cumplia años. Habia en el bar otro cumpleaños y aunque mientras charlábamos con las chicas no unimos grupos apenas ellas decidieron irse a dormir salimos a la puerta del hostel con el otro cumpleaños y de ese grupo habia una brasilera a la que le gustaba peter pero que no hablaba una palabra de ingles y a la que peter no encontraba nada mal pero con la que no podia comunicarse teniendo en cuenta su casi nulo portugués, y entonces fue ahí cuando saque mis grandes dotes de celestino traductor y ¡ se ha formado una pareja!! Dije antes de irme a dormir a las 2 de la mañana.
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