Baje con la bici, serpenteando entre los autos que ansiosos ya encendian sus motores y hacían sonar sus bocinas antes de salir del ferry. Un guardia me señalo que me moviera de la via y termine rodeado de taxistas haciendo las preguntas de siempre y riendo de sus ocurrencias, si supieran que las escucho cada vez que se juntan mas de dos personas. Pregunte por la salida hacia Porlamar, ciudad comercial de la isla y donde supuestamente estaban los hoteles y restauntes , la idea era hacer dedo , o pedir la cola como se dice en Venezuela y colombia, no resulto, eran ya las 9 de la noche y a esa hora esta todo muerto.me cruce con un camionero y su ayudante que caminaban por ahí y me sugirieron que pidiera en el comando o en la PTJ( policía judicial) a los dos me dirigui y de los dos lugares recibi idénticas respuestas, no estamos autorizados a dejar que extraños permanezcan en el lugar, que por ellos si, pero que no podían,cuantas veces la misma respuesta, respuestas que encubren actitudes poco solidarias en fachadas institucionales tan convenientes como cobardes, y no es solo en la socialista Venezuela en donde se pierden los fundamentos y los ideales altruistas de la creación de estas instituciones a medida que le agregamos normas inamovibles basándonos en premisas se subsistencia y seguridad, cuanto miedo a ayudar hay a veces, y aunque superficialmente nos sentimos justificados, sabemos que en la negación de ayuda hay algo que esta mal, pero nada hacemos por cambiarlo, ya aparecerá alguien que lo haga, y lo vamos a admirar, sigamos esperando inmoviles.
Apenado con la cuestión pero consiente de que dormir, donde fuera, iba a dormir ,segui pedaleando la oscura via por la que habia salido del puerto. Encontré la oficina de conferry, la empresa que tiene el monopolio del transporte entre margarita y el continente por agua.al lado del edificio, una construcción con una galería techada precariamente. Afuera de la oficina un seguridad sentado, le pregunte si habia algún problema en armar la carpa, dijo que eso no era de conferry ahora, que le preguntara al hombre que en ese momento cerraba la puerta de la construcción donde se guardaban herramientas para arreglar la ruta, este me dijo que ningún problema para el , pero que le preguntara al guardia, este entonces me dijo que por el nigun problema pero que le preguntaría a su jefe, pero que en ese momento estaba ocupado. Comenzó a soplar el viento, y se levanto el olor a lluvia, cansado de esperar arme la carpa , meti todo adentro, ate la bici y me meti tambien. Cuando la lluvia empezó el lado que mas expuesto se encontraba empezó a filtrar agua. No estaba de muy buen humor, todo era mi culpa en realidad, quien empezaría un viaje en bici por un continente mayormente tropical con una carpa de us$12 sin cubretecho. Asi y todo , estaba demasiado cansado y me dormi.
me desperté antes de las 7 picado por algo tan pequeño como para que pase el mosquitero de la carpa barata que uso , el piso estaba mojado por el agua que habia entrado de costado en el chaparron de anoche, no me quiero imaginar que hubiera sido si hubiese acampado a la intemperie. Arme todo putiando todavía por la perdida de mi cepillo de dientes y mi cucharita limpiadora. Arme un nesquik amargo con el cacao socialista y la leche del mercal que sirvió como desayuno, porque cuando no hay pan, bueno es lo que venga. Me subi a la bici y empece a pedalear tranquilo y no forzando mucho mi humor rumbo noreste en búsqueda de playa yuque, conocido destino para practicar deportes como el wind surf y kite, claro que a pesar de preguntar a varias personas, la distancia era todavía desconocida. Pase tranquilo los 12 kms que uno me habia indicado hasta que llegue a los 15 que otro habia marcado como meta, claro que según el ahí debía de estar yuque y no el cruce a esa playa. 6 kms mas y entonces si lo divise. A la entrada del poblado y sin necesidad de preguntar vi lo que estaba buscando para hospedarme, un amplio y con pinta de playero backpacker, EL YAQUE MOTION, con habitaciones individuales y departamentos para varios, terrazas y cocinas, wi fi, lavadero, en resumen, lo que un backppacker busca y todo esto ubicado frente a la costa y a escasos 100mts de los restaurantes y las escuelas de kite y wind surf. Su dueño alemán y su admistradora holandesa me mostraron la habitación con aire acondicionado donde deje todo mi equipaje . me pegue la mas que necesaria ducha y subi a la terraza a conectarme de nuevo con el mundo que habia abandonado en chichiriviche, el de internet, avise a casa, actualize la pagina y revise mails, a pesar de haber dejado colgados a mis amigos en su dia sin haber llamado a ninguno, la mayoría escribió un mensaje de animo para mi, gracias, por eso son mis amigos.
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