Puerto Mado a Garuape

Me despertó una intentada de apertura de puerta,que por suerte habia trabado el dia anterior, el que limpiaba creía que debía estar fuera a las 7. Finalmente me termine yendo de puerto mado , cerca de las 9 de la mañana previo paso por la panadería a comprar mi medio kilo de pan, que comi mientras pedaleaba rumbo sur. El dia habia arrancado con una nieble densa y humeda pero de a poco se iba dispersando dando paso a un sol tibio que se me hizo agradable. Pare en El Dorado a cambiar los 15 reales que me quedaban y para eso hube de entrar unos 5km de subidas y bajadas análogas a las que ya venia haciendo desde que habia salido de puerto Iguazu. El cambio lo consegui en una consecionaria de autos, obviamente con una tasa que era un robo. Igual ahora con pesos ya era otra cosa. Compre un yogurt de litro y me lo tome mientras buscaba el inexistente wi fi para avisar a la flia de mi llegada a Argentina. Guarde todo y me disponía a dejar El Dorado cuando un señor mi hizo señas para que frenera, Perdoname por hacerte frenar, mi hijo estaba viendo de hacerse un carrito y el tuyo esta bueno, No se preocupe, es lo que mas llama la atención, le dije. Y nos quedamos charlando un rato. Ernesto era viajante y vivía en Posadas hacia a donde ahora se dirigía, le saco un par de fotos al carro y me despedi para agarrar la ruta 12 de nuevo. Lamentablemente salía tarde de nuevo eran cerca de las 12:30 y solo tenia hecho hasta el momento 20 km. Segui pedaleando las empinadas cuestas y dejándome caer en las pronunciadas bajadas hasta que cerca de las 2:30 de la tarde llegue a Montecarlo, conocido por un zoológico, un acuario, un laberinto y la fiesta nacional de la orquídea mas la provincial de la flor. Buscaba un poco de azúcar y aunque me costo bastante encontrar algo abierto a esa hora, consegui una despensa en la calle de entrada pero a casi un km de ella donde compre una coca de litro, la primera en argentina, y unos bizcochitos dulces , de esos que son bien materos.
Despues de la inyección de azúcar segui pedaleando,a la hora encontré a Ernesto que me habia pasado hacia un rato y habia decidido armar unos mates, con lo que nos quedamos charlando un rato y tomandonos unos amargos. Me dio un teléfono por si precisaba algo en posadas y me regalo un paquete de galletitas surtidas que me vineiron barbaro. Arranque de nuevo, el calculo exagerado de 150 kms por dia habia dado paso a un estimado de 75 que terminaron siendo ese dia, unos 80, que dentro de todo fueron muchos si tenemos en cuenta que a los dos km de dejar a Ernesto la goma trasera se me desinflo casi totalmente y la mantuve a flote inflándola cada 10kms. con lo que llegue con el sol casi desapareciendo en el pueblo de Garuape donde por primera vez en el viaje pedi armar la carpa en una estación de bomberos voluntarios de Argentina. Allí Gerardo y Patricia me recibieron muy bien, en las precarias instalaciones en las que trabajan, que para colmo son prestadas y que mantienen con muchísimo sacrificio sin recibir ningún tipò de apoyo oficial ni privado teniendo que incluso, comprar sus propios uniformes y todo para realizar un trabajo sumamente necesario y ad honorem. Me pegue una ducha y me fui a la estación de servicio del pueblo, único lugar con internet y con wi fi con el que logre llamar a casa para dejarlos tranquilos. Mas tarde volvi, compre un par de hamburguesas que agregamos al arroz con carne picada y papas que cocino Patricia y arme la carpa para irme al sobre cerca de las once de la noche