Hace ya cuatro días que estoy en Auckland, sali de casa, en Alta Gracia, cerca de las 2 de la tarde del martes de la semana pasada, por suerte al aeropuerto me llevo Nico. Ese dia habia dormido casi nada, los chicos se habían ido a las 2 y media de la mañana y me habia despertado para despedirme de Guadalupe cerca de las 6 con lo que en el vuelo Cordoba- Buenos Aires lo dormi casi entero . Llegue a Ezeiza a las 18 y tuve que hacer tiempo tomandome el café mas caro del mundo ($8,50) en el restorant de la terminal B solo para poder usar el Wi fi. Me quede hasta las 11 de la noche , el vuelo a Auckland partia a las 2 de la mañana pero el check in empezaba 3 horas antes. Mientras el frio me congelaba,recordaba como olvidándome del de los aires acondicionados y de los aviones habia despachado todos los abrigos, pero soy una persona con suerte y antes de entrar a la sala de espera de la puerta 11 encontre un buzo polar que alguien se habia olvidado: - Perdone Señora, sabe de quien es esto?, pregunte a la encargada que barría, No, se lo debe haber olvidado alguien, contestó, Perfecto, entonces si ese alguien vuelve, dígale que yo lo tome prestado hasta que el vuelo salga. Por suerte el que se lo habia olvidado ya se habia tomado otro avión con lo que termine subiendo al mio con el regalo del cielo puesto. Dormi durante todo el vuelo, menos en los dos momentos que las azafatas me despertaron para comer y llegue a Nueva Zelanda despues de 14 horas de vuelo y siendo las 8 de la mañana del otro dia. Pase migraciones sin mayor problema y busque a Gandhi que me esperaba guardado en una caja. Afuera llovia . por suerte en el aeropuerto de Auckland hay lugares y herramientas de uso gratuito para armar bici. Me tome mi tiempo y luego me meti dentro para esperar que la caída de agua mermara, no era lo mas agradable empezar mi viaje todo empapado.
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